De malos y buenos.

Desde hace años he leído y escuchado un mismo discurso que no permearía en mi si no fuese una víctima directa de una historia que les tocó vivir a miles de guatemaltecos (digo, decir neoliberal, lucha, pueblo, resistencia, puede no significar nada para algunos). Yo también sería una más de las que poblan las universidades de mi país deseando tener una carrera para escalar encima de los otros y explotarles...soñando con trabajar en una empresa transnacional, vender lo único que tengo, mi fuerza de trabajo. Yo también diría que Zelaya es un tipo que pretendía abusar de las leyes para reelegirse, que los militares de Honduras únicamente cumplieron con una orden del Congreso para quitarlo del poder y reprimir a los miles que ahora se volcan a las calles. Yo también saldría a las calles para celebrar la independencia de Guatemala, con esas bandas algo ridículas de estudiantes inconscientes celebrando a la patria. Pero no, yo creo que Micheletti es un gorilletti y que los militares vuelven a ser lo que siempre han sido. Asesinos. Desde aquí, desde el lado de los que creemos en el discurso de los derechos humanos, de los exiliados y refugiados que fuimos gracias a la fuerza de la bota militar ( y la bestialidad diría yo), mi solidaridad con el pueblo de Honduras.
Pic from the blog Honduras en Lucha!